Una exposición conjunta para ABA Art - Convent de la Missió, enmarcada dentro del programa Firstfocus_advisor de PALMAPHOTO 2013
Blackmatic
“Y tendrás razón cuando asegures haberme visto caer, lo que sucede, en realidad, es que he caído a un lugar que crees que no existe porque no puedes ver, pero recuerda: quizás sea tu mala visión lateral la que te impide vislumbrar la realidad oculta, pues en realidad me he abalanzado hacia un paraíso paralelo. Caí de lado, corrí hacia las puntas, salí de tu pantalla y me perdiste”.
Adriana Petit
Absolutamente desbordados por la completa
omnipotencia de las nuevas tecnologías, sin poder asumir todas sus
posibilidades, hemos terminado confiando en el azar gran parte de los
resultados de nuestras creaciones: no podemos con una superioridad que nos
controla más de lo que nosotros la controlamos a ella. “Nocturna” y “piel” son
las primeras palabras que vienen a la cabeza de Marcelo Viquez cuando ve las
fotografías de Adriana Petit, dos palabras tan directas como quien las piensa,
como quien las inspira. Viquez hace de seleccionador, dentro de la obra de
Petit, en busca de conexiones estéticas, formales y conceptuales, un caos
(casi) sin control, un torrente creativo, del que Viquez extrae las imágenes
que le interesan y las procesa. Luego viene su parte, la parte de Viquez, y
aquí es donde el artista confía en el azar y en otras muchas cosas, en un azar
dirigido y estimulado -¿es esto posible?- mete las coordenadas en el buscador y
le aparecen sus fotos, las fotos que tienen en común la piel, la nocturnidad,
el azar y la alevosía, unas fotos que no aparecerían si Viquez, antes, no las
hubiese captado, no las hubiese puesto allí. Un proyecto que, sin duda, sirve
como metáfora de los procesos y de los resultados de la fotografía
contemporánea.
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